Las Águilas Cibaeñas tomaron el control de la serie final del béisbol local, al vencer 8-1 a los monarcas Tigres de Licey, en un partido disputado en el estadio Quisqueya, en la capital del país caribeño, ante unos 14 mil espectadores.

Los visitantes definieron el encuentro en el octavo capítulo, gracias a un vuelacerca con dos a bordo del panameño Johan Carmargo, para romper un empate a una carrera.

Los amarillos anotaron cuatro vueltas más en el noveno para sellar la victoria, tres de ellas por doble con las bases llenas del inicialista Edwin Espinal. El receptor Christian Bethancourt aportó tres indiscutibles a la ofensiva amarilla.

Los Tigres dominaron el encuentro (1-0) en los primeros siete episodios, ya que en el primer capítulo marcaron una vuelta, por sencillo remolcador del receptor Yermín Mercedes, ante el abridor Michael Roth, quien no tuvo decisión.

Roth se enfrentó en un duelo de pitcheo con el abridor azul, Jair Jurjens, quien tiró cinco entradas de una carrera.

El lanzador ganador fue el criollo Abel de los Santos (1-0), en labor de relevo de una entrada sin permitir anotaciones.

Los relevistas Richard Rodríguez y Juan Grullón también desfilaron por el montículo por los ganadores, que dispararon diez imparables, contra ocho de los felinos.

El importado Dustin Antolin (0-1) cargó con la derrota, al permitir dos carreras en un episodio.

El receptor Mercedes, con tres incogibles y una producida, y el campocorto, Erick Aybar, con dos inatrapables, fueron los mejores con el madero por el equipo perdedor.

La serie, pactada al mejor de siete, se traslada este miércoles al estadio Cibao, en la ciudad de Santiago de los Caballeros (norte).

Las cuyayas suman diez temporadas sin ganar una corona, ya que la última vez que levantaron la copa fue en la campaña 2007-2008.

La temporada pasada fueron a la final contra los bengaleses y cayeron en un partido de desempate.

El campeón obtendrá el derecho de participar en la Serie de Béisbol del Caribe, a celebrarse este año en la ciudad de Guadalajara, México.

EFE